No tengo más miedos que el de no saber expresar lo que siento al mirarle. Sé que no logro decir todo lo que me gustaría. Sé que siempre es más, y que sólo la piel me sirve de vía para resolver sus dudas.
Lejos de sombras, lejos de lágrimas. Cerca del frío sólo por los escalofríos que provocan sus labios rodeando mi ombligo, donde para a beber, sediento, todo de mí.
Me encargaré de dejar siempre la esencia a caricias en su almohada, para que sueñe con despertar conmigo.
Me encargaré de dejar siempre caer una pestaña en su almohada, por cada sueño por cumplir con él, para que choquen con las suyas como cuando le regala un beso a mi mejilla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Pompas