Estás mirando tu reloj de pulsera en esta tarde en la que hemos recorrido cada rincón de la ciudad. Las diez y media,me dices. Cansados,nos sentamos en un muro de cemento que adorna el solitario callejón y me miras,en silencio. Estamos sentados en un viejo y maloliente lugar donde lo único que importa es que tus ojos verdes,alumbrados por la poca luz que llega hasta nuestros cuerpos, se quedan impasibles ante los míos. Sin apartar la vista de mí vuelves a repetir con una voz que sólo llegan a oir tus labios : las diez y media. Me acerco a ti lentamente. Nuestras narices se besan con timidez. Me dices que cierre los ojos y yo,dejándome llevar, obedezco. Preparo mis labios para besarte,pero espero y espero y tu boca no se mezcla con la mía.Tu lengua no se enreda con mi lengua,tus dientes no muerden los míos. Abro los ojos intentando saber por qué no me besas. Y aquí me veo,sentada en el mismo muro de cemento,oliendo el mismo olor,a las diez y media,con la misma luz alumbrando mi cuerpo,sola,sin ti. El mismo lugar,la hora exacta,pero sin ti.
Me dio mucha pena :( y la canción que estaba escuchando mientras la leía no ayudaba a que me diera menos!!
ResponderEliminarMe gustó a pesar de entristecerme.
Un saludo ^^
Un día sensible es el culpable ! jajaja me alegro de que te gustara ^^
ResponderEliminarOtro saludo para ti !